Ayer, domingo, día 25 de septiembre de 2016, ha tenido lugar la Eucaristía en la Basílica de la Virgen de las Angustias, a las doce de la mañana por los cuerpos de Hermanos Horquilleros y Hermanas Cofrades de la Hermandad Sacramental de Nuestra Señora de las Angustias, en el día grande en Granada, de la salida procesional de la Stma. Virgen de las Angustias.
La Basílica ha estado repleta de fieles, de pie, ya que los bancos fueron retirados de la nave central para facilitar la salida de la procesión, por la tarde. Todos han seguido la celebración de la Eucaristía con mucha devoción y amor a la Stma. Virgen.
La misa ha estado presidida por D. Manuel Reyes Ruiz, Delegado Episcopal para las Relaciones Institucionales de la Diócesis. Las lecturas han sido realizadas por miembros de la Hermandad.
D. Manuel empezó su homilía con estas palabras: "Hemos venido todos a celebrar esta eucaristía delante de la imagen de nuestra Señora. ¿Qué nos ha traído aquí? ¿Qué sentimientos nos han movido; qué dolores, qué esperanzas, qué recuerdos, qué nostalgias? ¿Cuántas personas traemos en el corazón de los que fueron o de los que están? ¿Cuántas súplicas traemos a la Stma. Virgen? Yo pienso que esta es una celebración especial, que está llena de mucho sentimiento en el corazón; si no, no estaríamos aquí apelotonados, molestos, pero nos mueve el sentimiento del amor a la Santísima Virgen y el peso que cada uno de nosotros traemos en el corazón. Esto es lo que nos empuja y nos da fuerzas para estar aquí delante de ella, dispuestos a escuchar la palabra de Dios, breve, y a alimentarnos con el cuerpo de nuestro Señor Jesucristo". Continuó su homilía fijándonos en dos imágenes: Jesús en la Cruz en sus últimos momentos, la Virgen al píe de la cruz y aquí nos entrega a su Madre como Madre nuestra. Segunda imagen: Jesús está muerto y Ella nos lo muestra en sus rodillas y nos dice: tomadlo como hermano, tomadlo como esperanza de vida y de resurrección y tomadlo como lleno de misericordia. Estas dos imágenes son las que celebramos hoy en esta imagen de la Virgen de las Angustias. Ser cristianos es tener a Jesucristo como nuestro Maestro que ilumina nuestras vidas. Siguió explicando la lectura del evangelio del rico y el pobre, haciéndonos caer en la cuenta de que los pobres son muy numerosos en nuestra sociedad actual y con sufrimientos nuevos: paro, desahucios familias rotas, ancianos solos, etc. Jesús se identifica con los pobres cuando nos dice: "estaba hambriento y me disteis de comer , desnudo y me vestisteis, sediento y me disteis de beber…". Esto nos tiene que mover al amor a los demás, a compartir, a la caridad y en una palabra a la misericordia. D. Manuel terminó su homilía así: "…Que tengamos un día feliz de la Virgen de las Angustias, que nuestra fe se muestre esplendorosa, que el amor a la Virgen brille en nuestras calles y que la celebración de la Virgen sirva para aumentar nuestra fe y nuestra vida cristiana, por el amor a Jesucristo y siguiendo con la apertura del corazón a los que sufren a nuestro alrededor".
La Eucaristía ha sido solemnizada con la actuación del coro San Alfonso de los Antiguos Alumnos Redentoristas de Santafé, con varias canciones polifónicas, muy bien seleccionadas e interpretadas con mucha afinación y delicadeza espiritual, haciendo que todos los asistentes pudieran interiorizar la devoción y el amor a la santísima Virgen. La misa terminó con el canto del himno a la Stma. Virgen de las Angustias, acompañado al órgano, por D. Luis Linares, organista titular de la Basílica de la Virgen de las Angustias, que fue cantado con auténtico fervor mariano por el Coro y por todos los presentes en la celebración, seguido de un larguísimo aplauso.
Reseña y fotos realizadas por Antonio J. Mezcua Roelas.-