En el día de ayer, domingo, día 1 de junio de 2014, tuvo lugar la convivencia de todos los grupos parroquiales que funcionan en la Basílica de la Virgen de las Angustias.

Fueron más de setenta personas las asistentes a este encuentro familiar parroquial.

Varios miembros de la hermandad iban dando la bienvenida a todas las personas, que iban llegando a la misma, entregándoles un distintivo en el que cada uno ponía su nombre para ser fácilmente reconocidos.

La convivencia dio comienzo a las once de la mañana, coordinada por D. Blas Gordo, que con su natural simpatía, dio la bienvenida a todos los asistentes con una oración en la que todos intervinieron.

Como lema se podía leer en un precioso, cartel que ha sido realizado por Berta Barón y que presidía la reunión: "POR UNA PARROQUIA MISIONERA"

D. Blas explicó varios puntos del documento "Evangelii Gaudium" del Papa Francisco donde se desarrolla el tema de la evangelización misionera y que sería el núcleo de estudio y reflexión de la jornada.

Se formaron cuatro grupos para sacar conclusiones sobre el mismo y cada grupo nombró a un coordinador para recoger las aportaciones de los presentes y después exponerlos en la puesta en común que tendría lugar después de la comida de hermandad.

Sobre las dos de la tarde se tuvo la comida de fraternidad, que tuvo lugar en la terraza cubierta de la Basílica, con los alimentos aportados por todos los asistentes a la convivencia y que previamente habían elaborado con mucho cariño en sus casas, de ahí su exquisito paladar. La comida fue amenizada por una fuerte tormenta de granizo que hacía los comentarios unas veces jocosos y otras de preocupación.

Después de la comida todos se trasladaron a los salones parroquiales donde se tuvo un momento lúdico y musical, que había preparado Dña. Ana Maldonado, profesora del Colegio Parroquial "Escolanía Virgen de las Angustias". A continuación se pusieron en común las conclusiones del estudio realizado en los grupos y que fueron muy enriquecedoras para todos.

A las cinco de la tarde se tuvo la Eucaristía que cerraba esta jornada de convivencia parroquial. D. Francisco Molina, Párroco de la Basílica presidió la Santa Misa, acompañado por D. Blas Gordo y D. Manuel García. En su homilía resaltó la importancia que tiene el que todos seamos misioneros en nuestros propios entornos, dando testimonio de nuestra fe con nuestras buenas obras.

A las doce de la mañana tuvo lugar la Eucaristía de la Hermandad Sacramental de la Virgen de las Angustias en la Basílica, que presidió D. Manuel Reyes con la iglesia repleta de fieles, que siguieron la celebración con devoción y recogimiento.

D. Manuel hizo una reflexión sobre la Ascensión del Señor a los cielos resumiéndola en tres dimensiones fundamentales: 1ª El triunfo de Jesucristo, Jesús de Nazaret, que sube a los cielos para incorporarse al misterio de Dios y vivir a la manera de Dios. 2ª: Jesús permanece entre nosotros y 3ª: Nosotros estamos llamados a aspirar los bienes del cielo. Acabó su homilía diciendo: "… La Ascensión es la fiesta que nos atrae como un imán hacia nuestro destino, que es el contacto con el Señor, la vida eterna. Es la fiesta de la esperanza. Pongamos el corazón en aquel que es nuestro destino; que donde está Él, estamos llamados a vivir todos nosotros."

Crónica y Fotografías realizadas por Antonio Joaquín Mezcua Roelas